
Cada cuatro años, los chilenos ejercen su derecho al voto para elegir al presidente y los parlamentarios que los gobernarán. Desde las elecciones de 1989, Chile goza de más de 30 años de votaciones democráticas ininterrumpidas. ¿Cómo funcionan las elecciones en Chile? ¿Cómo se elige al presidente y los miembros del Congreso?
Resumen
- Cada cuatro años, los chilenos votan en elecciones generales en las que eligen a su presidente y renuevan su Parlamento.
- El candidato presidencial que supere el 50% de todos los votos en la primera votación será el próximo presidente de Chile.
- Si ningún candidato presidencial supera el 50% de los votos, entonces se dará una segunda vuelta con los dos candidatos más votados.
- En la segunda vuelta, el candidato con mayor votos será quien llegue al cargo presidencial.
- El parlamento de Chile está dividido en dos cámaras: la de diputados y la de senadores.
- La determinación de quiénes serán parlamentarios dependen de varios factores: el número de escaños para una determinada división territorial, la cantidad de votos que tiene una lista y la cantidad de votos que tiene un candidato.
¿Quiénes pueden votar en Chile?
Empecemos por lo más básico: ¿quiénes pueden votar en Chile? Como explica el documento del Servicio Electoral de Chile (SERVEL), tienen derecho al voto todos los chilenos que tengan cumplidos 18 años de edad el día de la votación. También pueden votar los extranjeros que vivan más de cinco años en el país y los hijos de chilenos no nacidos en Chile que vivan en el país durante al menos un año. En el caso de los chilenos que viven en el extranjero, pueden votar en las elecciones presidenciales, en las primarias presidenciales y en los plebiscitos, pero no en las elecciones de senadores, diputados, alcaldes, concejales y consejeros regionales.
Ahora, no necesariamente todas las personas que cumplen con los requisitos anteriores pueden votar. Existen algunas condiciones que impiden ejercer el derecho al voto:
- Estar interdicto por demencia
- Estar acusado por un delito que merezca pena aflictiva o por un delito de conducta terrorista
- Estar condenado a una pena aflictiva, por un delito de conducta terrorista o por delito de tráfico de estupefacientes que merezca pena aflictiva.
- Haber perdido la nacionalidad chilena
- Haber sido sancionado por el Tribunal Constitucional por promover partidos, movimientos u otras formas de organización que no respeten el régimen democrático.
Un término que seguro llama la atención es el de “pena aflictiva”. Para entenderlo, debemos saber que en Chile los delitos se clasifican, según su gravedad, en crímenes, simples delitos y faltas. La gravedad de cada tipo de delito, como se puede intuir, trae consigo penas de distinta severidad. Así, los crímenes son los delitos más graves y los que merecen penas más severas. Por ejemplo, los delitos cuyas penas obligan a los condenados a pasar el resto de sus días en prisión son crímenes. Los simples delitos, por otro lado, implican penas menos severas que los crímenes y las faltas son sancionadas con penas más leves que las que afectan a los crímenes y simples delitos.
Pues bien, las penas aflictivas son todas las penas que se aplican para los crímenes y para algunos tipos de simples delitos. Por ejemplo, las penas de presidio para los simples delitos son consideradas penas aflictivas. El presidio es una pena que esencialmente consiste en el encierro en prisión más trabajo para el delincuente. Las especificaciones de a qué penas aplica se encuentran en el artículo 37 del Código Penal chileno.
Ya sabemos quiénes pueden votar, pero un detalle muy importante de la democracia chilena es que el voto no es obligatorio. Esto trae algunas consecuencias que se pueden entender mejor en este video:
¿Cómo se elige al presidente?
Veamos ahora cómo se elige al presidente chileno. Para esto, tenemos que comenzar por entender que Chile tiene un sistema de gobierno presidencialista. Tal y como contamos en uno de nuestros videos, el sistema presidencialista se caracteriza porque los ciudadanos, aparte de elegir a un parlamento, también eligen a un presidente. Este presidente es tanto jefe de gobierno como jefe de Estado. Veámoslo más detenidamente.
Los sistemas presidencialistas son diferentes a los sistemas parlamentaristas como el que funciona en el Reino Unido y otros países de Europa. En los sistemas parlamentaristas, los ciudadanos eligen parlamentarios y son estos los que eligen al jefe de gobierno, que en esencia es el encargado de ejecutar políticas públicas —junto a su equipo de ministros— y de administrar el país. Este jefe de gobierno responde al parlamento que, en sistemas como el del Reino Unido, puede removerlo.
Por otro lado, los gobiernos parlamentaristas suelen darse en monarquías. Esto trae como consecuencia que en los parlamentarismos dentro de monarquías haya un jefe de Estado que es distinto al jefe de gobierno. Por ejemplo, en el Reino Unido, España y Suecia, el jefe de Estado es el rey o la reina, un cargo que no depende de la elección popular. Como vemos, este no es el caso de Chile, donde la jefatura del gobierno y el Estado recaen sobre una misma persona: el presidente elegido por votación universal.
Ahora, el proceso para elegir al presidente es bastante sencillo. Según la Constitución Política de la República de Chile, el presidente será elegido en votación directa y por una mayoría absoluta de los sufragios válidamente emitidos. ¿Qué quiere decir esto? Que el candidato que consiga el 50% de los votos más uno, será el presidente de la República.
¿Qué sucede si ningún candidato consigue más del 50% de los votos? En este caso, se procede a una segunda votación llamada comúnmente «segunda vuelta». Sin embargo, en esta nueva votación solo participarán los dos candidatos que obtuvieron más votos en la elección. El ganador es simplemente el candidato que obtiene más votos. Una vez elegido, el candidato ocupará el puesto de jefe de Estado por cuatro años, asumiendo sus funciones un 11 de marzo del año que le corresponda (2022 en el caso de las elecciones más próximas a la redacción de este informe).
¿Cómo se elige a los parlamentarios?
A diferencia del caso del presidente, la elección del Congreso Nacional de Chile es un poco más complicada. Lo primero que tenemos que entender es que en Chile existen dos clases de parlamentarios: los diputados y los senadores. En otras palabras, Chile tiene un sistema bicameral de Congreso.
¿Qué es un sistema parlamentario bicameral? Según la Enciclopedia Británica, un sistema bicameral es un tipo de gobierno en el que el Poder Legislativo está dividido en dos cámaras. Como explica un documento de la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, los parlamentos a nivel mundial funcionan con dos tipos de estructura: unicameralismo y bicameralismo. En simple, en los países bicameralistas los parlamentos funcionan con dos cámaras compuestas cada una por parlamentarios distintos mientras que en los países unicameralistas los parlamentos solo tienen una cámara.
De esta manera, en Chile tenemos un sistema de dos cámaras. Está la Cámara de Diputados con 155 escaños y el Senado con 50 (desde el 2022). Ahora, lo siguiente que tenemos que entender es que, para fines administrativos y electorales, el territorio de Chile está dividido. Según la Constitución, el Estado de Chile es unitario y su autoridad máxima es el presidente de la República; sin embargo, para el cumplimiento e identificación de objetivos de las autoridades, este se divide en distintos territorios.
Así, para la elección del Poder Legislativo, se establece una división político-electoral, compuesta por 15 circunscripciones para la elección de senadores y 28 distritos para la elección de diputados.

Cada circunscripción y distrito tiene un número diferente de escaños asignados. Cada circunscripción puede tener asignados de dos a cinco asientos para senadores, mientras que los distritos pueden tener entre tres y ocho para diputados. Cabe resaltar que la cantidad de escaños, tanto para cada distrito o cada circunscripción, depende de la cantidad de habitantes de la zona.
Por ejemplo, a la 7a circunscripción, que es la Región Metropolitana de Santiago, donde viven siete de los casi 20 millones de habitantes de Chile, le corresponde el mayor número de senadores: cinco. Dado su tamaño, además, en la Región Metropolitana de Santiago hay siete distritos electorales y a los habitantes de cada uno de estos le corresponde escoger entre cuatro y ocho diputados. En contraste, la Región de Arica y Parinacota es una circunscripción cuyos habitantes solo eligen a dos senadores y que comprende solo un distrito electoral que escoge a tres diputados. Si quieres saber más sobre cómo es esta división puedes entrar a la siguiente página.
Una última cosa que debemos saber relativa a las circunscripciones es que el Senado de Chile se renueva de manera alternada. A diferencia de la Cámara de Diputados, cuyos 155 legisladores se renuevan por completo cada cuatro en las Elecciones Generales correspondientes, en el caso del Senado solo se renueva una parte de los senadores cada cuatro años. Así, en las Elecciones Generales del 2017 se renovó a 23 senadores y en las del 2021 se escogerá a los 27 restantes. Pero ¿cómo se determina qué senadores serán renovados?
Para entenderlo, debemos saber que en Chile las circunscripciones tienen un número. Por ejemplo, como vimos líneas arriba, la Región Metropolitana de Santiago es la 7a circunscripción, un número impar. Esto último es sumamente importante porque el sistema electoral de Chile divide a las circunscripciones en dos grupos: impares y pares. En ese sentido, la renovación alternada consiste en renovar a los senadores de las circunscripciones impares y, cuatro años después, a los de las circunscripciones pares. Así sucesivamente.
De esta manera, como en el 2017 fueron los votantes de las circunscripciones impares quienes renovaron a sus senadores, en las elecciones del 2021 le tocará a los votantes de las circunscripciones pares renovar a los suyos. En las elecciones del 2021, los votantes de las elecciones impares ya no podrán escoger nuevos senadores sino que tendrán que esperar hasta el 2025 para hacerlo.
¿Cómo se asigna los escaños del Congreso?
Lo siguiente que tenemos que entender es cómo se determina qué candidato ocupará un escaño al término de las elecciones. Intuitivamente, uno podría pensar que los candidatos más votados son los que entran al parlamento. Por ejemplo, imaginemos que en la 7a circunscripción, correspondiente a la Región Metropolitana de Santiago, se presentan 20 candidatos de cinco partidos distintos. Lo más intuitivo es que, como a esta circunscripción le corresponden cinco senadores, entren los cinco candidatos más votados. Esto, sin embargo, no necesariamente es así. Un candidato podría convertirse en senador a pesar de tener menos votos que el postulante de otro partido. ¿Cómo es esto posible?
La respuesta está en que, para que un candidato se convierta en senador, no solo se toma en cuenta el número de votos que recibió individualmente, sino los votos que recibió la lista por la que postuló. Además, en Chile se aplica un método especial para asignar asientos llamado Método d’Hondt. Esto suena un poco complejo, por lo que te recomendamos ver el ejemplo de la siguiente sección.
Ejemplo sobre cómo se reparten los escaños
Digamos que tenemos cuatro listas diferentes (Azul, Verde, Rojo, Morada) que han presentado candidatos a diputados a un distrito al que le corresponden cinco escaños (este mismo procedimiento determina la elección de los senadores). Cada una de estas listas tiene varios candidatos que obtuvieron distintos votos cada uno. En la imagen de abajo, podemos ver el total de votos que obtuvo cada lista y los votos que obtuvo cada uno de los candidatos de ellas.

Como explica SERVEL, lo primero que debemos hacer es dividir el total de votos de cada lista entre 1, entre 2, entre 3, entre 4 y entre 5. Luego, debemos determinar las cinco cifras más altas obtenidas con el procedimiento de división anterior. Estas cinco cifras más altas determinarán cuántos escaños corresponden a cada lista. Este proceso lo podemos ver en la imagen de abajo.

De esta manera, tenemos que la lista Azul y Verde se llevarán dos escaños y la lista Roja un escaño. Ahora, para determinar qué candidatos de las listas se llevarán estos escaños, debemos fijarnos en quiénes tienen más votos. Así, en el caso de la lista Azul, Tony y Steve se llevarán los escaños; en la lista Verde serán Clark y Bruce; y en la lista Roja será Oliver.
Ahora, como podemos observar, los cinco candidatos que ganaron más votos no son necesariamente los que serán parlamentarios. Ash, por ejemplo, obtuvo 2,500 votos y es el cuarto candidato más votado, pero no será parlamentario. Por otro lado, Steve, con solo 1,100 votos, sí será parlamentario.
Otras consideraciones sobre las elecciones
Cabe resaltar que el sistema de Chile permite alianzas electorales entre varios partidos. Así, una lista de candidatos puede estar conformada por postulantes de distintos partidos. En ese caso, la repartición de escaños entre los diversos partidos que forman una lista se hace mediante el mismo procedimiento descrito en la sección anterior.
Por ejemplo, si la lista A (del ejemplo de la sección anterior) hubiera estado compuesta por tres partidos distintos, tendríamos que usar el método d’Hondt para repartir los dos escaños que ganó esta lista entre los distintos partidos que la conforman.
Por último, es importante mencionar que en Chile las listas están sujetas a cuotas de género. Esto significa que las listas que presenten los partidos deben tener cierta proporción entre candidatos hombres y mujeres. En el caso de Chile, el total de varones o mujeres no debe representar más del 60% de la lista.